¿Conoces las propiedades nutricionales de la lechuga? Seguro que es un alimento que comes habitualmente, así que te contamos todos sus beneficios.
La Lactuca sativa, conocida comúnmente como lechuga, es una especie de planta herbácea propia de las regiones semitempladas que se cultiva con fines alimentarios. Debido a las muchas variedades que existen y a su cultivo cada vez mayor en invernaderos, se puede consumir durante todo el año. Normalmente se toma cruda, como ingrediente de ensaladas y otros platos, pero ciertas variedades, sobre todo las de origen chino, poseen una textura más robusta y por ello se emplean cocidas.
La lechuga es rica en fitonutrientes, los que aportan propiedades beneficiosas para la salud. Es originaria de Asia pero se cultiva por todo el mundo. Esta compuesta por hojas verdes brillantes en forma redondeada.
La lechuga es una hortaliza que se destaca, al igual que la gran mayoría de verduras de hoja verde, por ser un vegetal que tiene muy pocas calorías, bastante contenido de agua y una prácticamente nula proporción de hidratos de carbono. Las calorías de la lechuga son tan sólo 15 por cada 100 gramos.
Variedades de lechuga
Son muchos los tipos de lechuga que existen y seguramente en la zona en la que vives vas a poder encontrar unos cuantos a mano. Estos son algunas de las variedades más comunes.
- Lechuga romana
- Lechuga iceberg
- Lechuga rizada
- Lechuga escarola
- Lechuga trocadero
- Lechuga francesa
- Lechuga americana
- Lechuga batavia
- Lechuga italiana
- Lechuga hoja de roble roja
- Lechuga sangría
–Aporta gran cantidad de Vitamina A, C, E, B1, B2, B3, y betacarotenos: Las hojas frescas tienen gran cantidad de vitamina A, y beta carotenos. Si consumimos 100 gramos de lechuga fresca al día, nos aporta la cantidad necesaria recomendada de vitamina A, y betacarotenos en el organismo.
–Tiene propiedades antioxidantes: La vitamina A, ayuda a mantener sanas las mucosas del organismo, ayuda a mejorar la piel y la visión. Al contener una gran cantidad de vitamina A, aporta al organismo una gran fuente de antioxidantes.
–Contiene vitamina K: Contiene vitamina K, que tiene un papel muy importante en el metabolismo óseo, y junto con el calcio y fósforo ayudan en el crecimiento de la masa ósea del organismo, y previene la osteoporosis. Estudios han demostrado que la vitamina K tiene un papel muy importante en la enfermedad de Alzheimer.
–Aporta oligoelementos: La lechuga contiene grandes oligoelementos como el selenio, que ayuda a prevenir al organismo de contraer ciertos tipos de canceres, como el de pulmón, colon, y próstata.
–Contiene folatos: Las hojas frescas contienen cantidades considerables de folatos. Los folatos son muy importantes para las mujeres embarazadas, sobretodo durante los primeros meses de gestación, ya que evitan defectos del tubo neural en el feto, y en el útero durante el embarazo.
–Contiene Vitamina C: La vitamina C, es un potente antioxidante natural, que ayuda al cuerpo a desarrollar resistencia contra agentes infecciosos, y es el encargado de eliminar los radicales libres dañinos.
–Contiene Xantina y carotenos: Las hojas de lechuga contienen gran cantidad de Xantina y carotenos. Se ha comprobado que una dieta rica en Xantina y carotenos, ayuda a proteger el organismo de contraer enfermedades oculares, tales como la enfermedad macular relacionada con la edad. También aportan gran cantidad de antioxidantes, y proporcionan un filtro natural contra los rayos UV en la retina.
–Contiene gran cantidad de minerales: Contiene gran cantidad de minerales en las hojas tales como el sodio, azufre, aluminio, cobre, cobalto, silicio, selenio, itrio, circonio, hierro, calcio, magnesio, y potasio.
Estos minerales son esenciales para el buen funcionamiento del cuerpo. El potasio es un mineral muy importante que ayuda a controlar la presión arterial y la frecuencia cardiaca. El hierro es muy importante para la formación de glóbulos rojos, y la curación de personas con anemia, y el cobre junto con el manganeso aumenta la producción de células en sangre.
–Contiene Vitamina B: Es rica en el grupo de Vitaminas B, tales como B6, la timina, y la riboflavina.
Cómo aprovechar bien sus nutrientes
Aunque el aporte nutricional de la lechuga es considerable, no siempre llega íntegro a la mesa. Tener en cuenta los siguientes puntos es imprescindible si se desea aprovecharlo al máximo:
- Comprar lechugas en buen estado. Una lechuga con manchas, con hojas rotas o que esté en cajas demasiado llenas, puede no tener la calidad adecuada.
- Elegirlas de temporada. Hay lechugas todo el año, pero su temporada arranca en primavera. Las bolsitas de ensalada preparada son una buena opción, aunque no tienen el mismo valor que la lechuga fresca.
- Conservarla bien. La lechuga debe guardarse en un lugar húmedo y fresco, al abrigo de la luz y el aire. En la nevera se aconseja dejarla en el cajón de los vegetales. No hay que juntarla con manzanas o peras, pues se altera antes. Tampoco debe congelarse.
- Evitar los remojados prolongados, pues se pierden en el agua gran parte de sus minerales y vitaminas.
- Aprovechar las hojas más verdes.
- No cortarla en exceso.
- Prepararla poco antes de comer.
- Aderezarla con zumo de limón o vinagre. El ácido cítrico y el acético tienen un poder conservante que preserva las vitaminas.