Los triglicéridos son un tipo de grasas que podemos ingerir a través de la alimentación (alimentos grasos) y el hígado también los produce cuando consumimos un exceso de energía o calorías. Estas calorías sobrantes se almacenan en forma de triglicéridos.
Los triglicéridos son grasas saturadas que se producen en el organismo a partir de otros ácidos grasos. Cuando se producen en exceso existe hipertrigliceridemia, y si ésta no es tratada a tiempo, puede llevar a una ateroesclerosis y a una posible afección cardíaca. Se considera que el valor normal de triglicéridos es de hasta 150 mg/dl. Cuando este valor se supera, se puede decir que se está produciendo una hipertrigliceridemia.
El tratamiento orientado a reducir los triglicéridos incluye modificaciones tanto en el estilo de vida (dejar el tabaco, practicar ejercicio físico de forma moderada y regular, evitar el sobrepeso u obesidad, evitar el consumo de alcohol) como en la alimentación. Se aconseja adecuar el aporte calórico a las necesidades de la persona para alcanzar un peso saludable y controlar la cantidad de grasa y azúcares simples ingeridos para evitar que se transformen en triglicéridos.
A continuación, os ofrecemos un ejemplo de dieta para hipertrigliceridemia:
DESAYUNO:
1 manzana (preferible con piel).
Leche desnatada con una cucharadita de lecitina de soja
Biscotes integrales (2) con jamón dulce o requesón o queso fresco.
COMIDA:
Verdura cocida con patatas hervidas.
Carne magra, pollo o pescado con guarnición de verdura.
Biscotes integrales (2 u.).
Yogurt natural desnatado.
MERIENDA:
Zumo de frutas natural.
Yogurt natural desnatado con lecitina de soja
CENA:
Verdura cocida o ensalada.
Pescado blanco o azul (100-150 g.) ó revuelto con verduras (máx. 2 huevos por semana).
Biscotes integrales (2 u.)